Una mujer entra a una agencia de BMW.
Ve un automóvil que le parece perfecto y se acerca a inspeccionarlo.
Al agacharse para tocar el interior, se le escapa un "sonoro pedo".
Muy apenada, se gira nerviosa para ver si alguien notó su pequeño accidente, esperando que no se aparezca nadie.
Pero al girarse atrás, se encuentra que allí, a un lado suyo está parado un vendedor.
"Buenos días, Señorita. ¿En qué le puedo ayudar?"
Muy incómoda, porque era obvio que el vendedor había escuchado el "accidente" le pregunta:
"Señor, qué precio tiene este precioso automóvil?"
El vendedor le responde con una media sonrisa...
"Señorita, si se le escapó un pedo de solo tocarlo , ¡se va a cagar cuando le diga el precio!!!"
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